Galletas de queso crema y vainilla con un toque navideño

 

 

Estas galletas las vi en el blog de Esmeralda (www.recelandia.blogspot.com), que a su vez las había encontrado en otro blog (www.aishakandisha.com).

 

 

 

Como nos estamos acercando a la navidad, se me ocurrió hacer una versión navideña y añadí a la receta un poco de fruta escarchada para ir entrando en ambiente.

 

 

 

Y la idea creo que salió muy bien. La fruta le da un puntito muy bueno. Crujientes por fuera, y suaves y blanditas por dentro.

 

 

 

Ingredientes:

 

• 100 gr de mantequilla
• 200 gr de queso crema
• 250 gr de harina de repostería
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 80 gr de azúcar
• 1 pizca de sal
• fruta escarchada cortada en trocitos muy pequeños

 

Elaboración:

 

- Batimos en un cuenco la mantequilla, el queso, la esencia de vainilla y la sal.

- Poco a poco vamos añadiendo la harina hasta que quede bien incorporada.

- Extendemos la masa sobre papel de hornear. Cubrimos con otro papel y lo vamos estirando con un rodillo hasta obtener un rectángulo de unos 2 - 3 cm de grosor.

- Lo metemos en la nevera durante una media hora. Después de este tiempo lo sacamos, espolvoreamos con azúcar y con la fruta, y lo enrollamos como un canutillo.

- Cortamos las galletas, las rebozamos con el resto del azúcar y colocamos en la fuente del horno.

- Horneamos a 200ºC durante unos 20 minutos y esperamos a que enfríen un poco.

 

 

 

 

Tan ricas que ya me he comido más de las que debía...



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El pasado domingo estuve plantando árboles. Todavía tengo agujetas en los brazos...

Me apunté con unos amigos como voluntaria para la Fundación Oso Pardo (www.fundacionosopardo.org) y plantamos cerezos y manzanos por el monte para que a nuestros osos no les falte de nada! Si os gusta la idea, este domingo se hará también.


 

El lugar precioso: Liébana, a unos 13 km del puerto de San Glorio
El día: soleado y resplandeciente
La compañía: inmejorable

Y aquí está... Mi primer cerezo.

 

 

En total plantamos unos 250 árboles (entre 48 personas) que servirán para recuperar bosque y alimentar al pequeño oso pardo cantábrico, que sigue siendo el más amenazado de Europa.