Como el año pasado, esta Semana Santa hice un postre tradicional.
Miré recetas y vi varias versiones, así que decidí hacer una mezcla de todas y añadir un toque de "chispa", en forma de licor.
Ingredientes para 4 porciones:
- 1/2 litro de leche
- 60 gr de harina de trigo
- 60 gr de harina de maíz (maizena)
- 100 gr de azúcar glass
- 2 huevo (uno para la masa y otro para el rebozado)
- Una cucharada de licor (el que más os guste)
- Una ramita de canela
- Azúcar y canela en polvo para espolvorear
Elaboración:
- En una olla, ponemos al fuego la mitad de la leche con la ramita de canela y el licor hasta que hierva.
- En un recipiente, mezclamos el resto de la leche con las harinas y el azúcar glas hasta que quede bien ligado. Ahora añadimos el huevo y batimos todo.
- Vertemos la mezcla en la olla con la leche caliente, lo mantenemos en el fuego flojo y batimos con unas barillas hasta que la mezcla espese (unos cinco minutos).
- Ponemos la masa en una fuente y esperamos a que enfríe. Una vez frío, lo cortamos en cuadrados, pasamos por harina y huevo, y freímos en abundante aceite.
- Para servir, espolvoreamos con la mezcla de azúcar y canela.
Quedó un postre tradicional, pero con algunas novedades.
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Y como ayer y hoy hemos tenido tan buenos días, Dani y yo aprovechamos para dar un paseo por el campo.
Siguiendo el río Miera, desde el pueblo de Rubalcaba, podemos encontrar cosas como estas.
Una buena caminata se merece un buen postre...
Y si encima tiene "chispa", mejor. Je, je...
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