Santa Juliana fue una chica que vivía en Nicomedia (actual Turquía) y que fue martirizada por su marido por dos motivos: negarse a perder la virginidad y negarse a abandonar la fe cristiana.
Así que su marido decide darle un bañito en estaño derretido y luego cortarle la cabeza...
La colegiata de Santillana del Mar alberga sus reliquias y este fin de semana han celebrado las fiestas de Santa Juliana.
Aprovechando que tenía trabajo por allí, hice unas fotos.
Además, la semana pasada tuve trabajo repostero: 125 pastas.
¡Record absoluto en la historia de mi horno!
De mantequilla, limón y nuez moscada, y de almendra.
¡Habrá que hacer cinco litros de café para esto...!
Por cierto, hablando de records....
¡NO HAY DOS SIN TRES!
Olé con olé, por el post, el trabajazo de las pastas y, bueno, vale, por la selección también ;)
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